No se puede.

No se puede aparentar estar entero,

Tragarte los dolores de cabeza, la opresion en el pecho y la lluvia dentro de ti.

Sigo buscando las piezas que perdí,

Tumbada en el sofá veo pasar los problemas como nubes sobre mi cabeza. 

Me entran ganas de fumar, » Si tú no fumas imbécil»…

Gritar con las letras es una nueva terapia, hay quien se lo guarda y procesa y luego estoy yo que vomito mis neuras en forma de tinta, de letras que unidas me marcan con una letra escarlata de «Gilipollas» en la frente. 

Y creo que no hay mejor castigo para uno mismo que no poder desprenderte de todo lo que haces mal,

Mancha tu orgullo y pisotea tu dignidad.

El monstruo que tengo dentro ya está destrozando cosas otra vez.

A veces me siento descolocada, como si estuviera desenfocada y borrosa para los demás y sin embargo otras veces creo que estoy más cuerda y soy más consciente de mi y de lo que me rodea que ellos, al menos me siento viva y pienso. 

Estan como dormidos,

Van por la vida con los ojos y el corazón cerrado.

A pesar de lo que piensen, yo siempre tengo mis motivos y soy coherente y consecuente con mis valores.

Por mucho que no los entiendan.

¿Beber un miércoles a las 9 de la mañana, está mal visto? Es para una cosa.